27.9.10

I.

Nada dura tanto en el agua
como la expiración del murciélago.

La noche a la intemperie
guía los ojos de sonar
del animal,
todo se le presenta,
se les hace presente.

Hay un simple aleteo,
el extracto de la sustancia del aire
en el agua.

La impresión del vuelo rasante,
de la sombra aquietada,
en el instante, es un atisbo de ondas.

Cazan al vuelo una mosca
aprovechando el viento, la profundidad del cielo, la boca
y la mosca misma.

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